Incapacidad para mantener espacios seguros
Es necesario que los propietarios mantengan un entorno relativamente seguro para que las personas que ingresan legalmente a una propiedad no sufran lesiones. La propiedad puede pertenecer a una persona, una empresa, o el gobierno. La responsabilidad de un local o edificio surge cuando el propietario no mantiene un entorno seguro.
Los reclamos por responsabilidad de locales cubren lesiones corporales, lesiones personales, y daños a la propiedad causados por el propietario, o dueño del animal. Las lesiones pueden ser por:
- Resbalones y caídas,
- Tropiezos y caídas,
- Objetos que caen,
- Condiciones peligrosas,
- Mordeduras de perros o animales,
- Negligencia en el diseño de una propiedad o su mantenimiento,
- Negligencia en la seguridad, y
- Piscinas.
Similar a otros reclamos por lesiones personales, los reclamos por responsabilidad de locales requieren de 2 elementos clave.
Primero: el dueño de la propiedad debe ser negligente. En su definición legal, “negligencia” significa que el dueño no ha podido “… comportarse con el nivel de cuidado que alguien con prudencia (una persona razonable) tendría ante las mismas circunstancias.” En pocas palabras, el dueño de la propiedad, “… no se comportó como al menos lo haría una persona razonable.”.
¿Qué significa lo anterior? Es algo complejo.
En la conducción de un vehículo, existen leyes diseñadas para proteger a todos. Después de un accidente, los oficiales de policía investigan el hecho para determinar si alguno de los involucrados violó alguna de esas leyes. Generalmente, esto ayuda a encontrar quien se equivocó y ocasionó el accidente.
En la responsabilidad de locales, existen pocas leyes que aplican y, por lo general, estos eventos no son investigados por la policía. En su lugar, como víctima, la “carga probatoria” está en sus manos. Usted debe probar que el dueño no pudo ejercer un cuidado razonable para prevenir las lesiones. Usted podría probar que este conocía sobre las condiciones peligrosas y no actúo como una persona razonable (ya fuese para advertir o corregir el peligro), o podría probar que fue negligente. De cualquier forma, como no hay una investigación policial, deberá probar la responsabilidad con evidencia como fotografías, testigos, o video.
Segundo: además de haber negligencia, para poder hacer un reclamo por responsabilidad de propiedad debe haber daños. Los daños son, “… pérdidas sufridas por la parte lesionada” incluidos los gastos médicos para tratar las heridas, el dolor, el sufrimiento, el desfiguramiento y la pérdida de salarios. Los daños deben ser causados por el evento para que sean incluidos en su reclamo. Si no existen lesiones o daños, un reclamo de este tipo podría no tener lugar.
Si usted o un ser querido ha sufrido lesiones sustanciales en la propiedad de otra persona, contáctenos para ver cómo podemos ayudarle. Es vital contratar a un abogado con amplia experiencia navegando las complejidades de los casos de responsabilidad de locales. Estos pueden ser casos complicados y con muchos obstáculos, y es por eso que suelen ser los casos menos exitosos. Tener al abogado correcto de su lado puede hacer la diferencia.
Resbalón/tropiezo y caída
Es de sorprender que las caídas corresponden al 32% de las lesiones no fatales ocurridas en el 2018, lo que las convierte en la causa número uno de lesiones evitables y la tercera en muertes evitables, después de las intoxicaciones y los accidentes vehiculares. Con más de 8 millones de caídas en un solo año, no es extraño que una gran parte de los reclamos por lesiones personales se deban a este tipo de accidentes.
Por lo general, este tipo de caídas ocurren en locales comerciales como restaurantes o supermercados, pero también pueden ocurrir en la casa de alguien o en una propiedad privada. Derrames desatendidos, pisos desnivelados o sueltos, cemento dañado, y alfombras dobladas en la entrada son algunas de las causas más comunes de las caídas. Según nuestra experiencia, regularmente se ha observado que incluso la presencia de uvas en el piso ha sido la causa de que una persona resbale.
Independientemente de los motivos por los que una persona sufre una caída, existen varios elementos importantes a tener en cuenta: la negligencia, las lesiones, y una fuente de dinero cobrable.
Carga probatoria
Como víctima de una caída, usted debe probar que el dueño de la propiedad, o la persona responsable de la propiedad, tenía conocimiento de una condición peligrosa y no hizo nada para advertirla o corregirla. El hecho de que usted se haya caído es suficiente. Usted debe demostrar que alguien más tiene la culpa de su caída. Usted tiene la carga probatoria. Para hacerla efectiva, deberá presentar la evidencia que sustente su reclamo.
Es normal sentirse avergonzado después de una caída. La reacción natural es ponerse de pie y tratar de desviar la atención. Inclusive podría sentirse obligado a abandonar la propiedad sin hablar con nadie. Esto hace difícil demostrar que el incidente sucedió. Una creencia común y desafortunada, es que cuando algo sucede en otra propiedad se tiene un caso que es “pan comido”. La realidad es que usted necesita evidencia si quiere hacer responsable al dueño de la propiedad.
Es importante recordar que cuando está tratando con una compañía de seguros, está tratando con una compañía “con fines de lucro”. Estas están en el negocio de ser rentables. No están en el negocio de regalar dinero o de ser generosos con las víctimas de lesiones. Harán todo lo que esté a su alcance para asegurarse su rentabilidad. Los ajustadores de seguros y los abogados que contratan a menudo reciben incentivos para retar y disminuir agresivamente el valor de un reclamo. Los costos médicos anuales por resbalones y caídas llegan a ser tan altos como 34 billones de dólares, y las aseguradoras no quieren cubrir estos costos y seguramente buscarán cualquier brillo de esperanza para denegar un reclamo.
Cualquier cosa que pueda obtener para sustentar los detalles de su lesión debe conservarse para su beneficio. La evidencia puede incluir un informe realizado en el lugar de los hechos, así que no se vaya sin antes hablar con alguien a cargo. Asegúrese de obtener una copia de los registros, como un informe del accidente, para poder verificar dónde, cuándo, y cómo ocurrió la caída.
Los testigos son de gran ayuda. Muchas veces, pueden contribuir a identificar qué estaba pasando al momento de la caída, qué causo la caída, y qué sucedió después. Las fotografías son también importantes porque pueden mostrar donde ocurrió el accidente e identificar la condición que llevó a que ocurriera. Y aún más convincentes son los videos, particularmente si puede grabar los testimonios de los testigos mientras los hechos están aún frescos en sus cabezas. Debe solicitar poder ver cualquier video de cámaras de vigilancia y pedir una copia; aunque casi todos los dueños de propiedades negarán su solicitud ya que no tienen la obligación de compartir estos videos sin una orden judicial. Si están dispuestos a mostrarle el video, puede grabar la pantalla con la cámara de su teléfono celular.
Contratar a un abogado de inmediato puede contribuir a conservar cualquier video que exista. Un abogado puede enviar una “carta de preservación de evidencia”2, esto es “…un aviso enviado a una parte contraria que solicita que toda la evidencia sea preservada”. El no preservar dicha evidencia puede resultar en una “inferencia adversa” si el caso llega a los tribunales; esto es, el juez instruiría al jurado que puede presumir que la evidencia destruida habría sido adversa para el dueño de la propiedad.
Daños
La presunción es que la caída causó lesiones físicas (por ejemplo, huesos rotos, articulaciones dislocadas, concusión o lesión cerebral, cortadas y marcas, etc.). Las lesiones sufridas en una caída requieren tratamiento médico. Sin este, es muy difícil demostrar que usted sufrió una lesión y que la caída fue la causante de otras cosas como el dolor, el sufrimiento, la pérdida de salarios, etc.
Un elemento clave en la demostración de los daños es el tratamiento médico que reciba. Este debe recibirse en un período de tiempo razonable. Esperar más de unos cuantos días o una semana para recibir el tratamiento da pie para que la empresa aseguradora se cuestione si las lesiones propuestas fueron causadas por la caída. Los registros médicos y las facturas correspondientes proporcionan una base para que el ajustador de seguros o un jurado comprendan lo que le sucedió.
Los registros médicos también sirven de evidencia de su dolor y sufrimiento, lo cual solidifica su reclamo. Poder respaldar sus lesiones con los detalles de su caída tiene mucho valor. Si usted afirma que se cayó y sufrió heridas, pero las notas del doctor reflejan que usted sufrió lesiones de una manera diferente o ni siquiera mencionan la caída, nadie creerá su afirmación. Por lo tanto, cuando visite al doctor, déjele saber que las lesiones fueron causadas por una caída y dele detalles del incidente. No le mienta al doctor. No exagere. No informe menos de lo que ocurrió.
Fuente de recuperación
Si se tiene la carga probatoria, y si hay suficientes lesiones y daños, lo siguiente que necesitará es una fuente de recuperación. Las fuentes de recuperación son usualmente pólizas de seguro de responsabilidad (por ejemplo, pólizas de responsabilidad empresarial, pólizas para propietarios de vivienda, etc.). Efectivamente, demandará al dueño de la propiedad o al operador, pero cualquier pago vendrá de la compañía de seguros. Si no hay cobertura, entonces deberá confiar en que el propietario tiene suficientes activos para pagar a título personal. Esto se conoce como “autoasegurado”. Sin una cobertura de seguro o activos suficientes para pagar sus daños, no existen fondos para pagar un acuerdo o un veredicto del jurado.
Un blanco fácil para los fraudes
Una de las razones por las que los casos de caídas resultan tan difíciles es porque, históricamente, han sido blanco fácil para realizar reclamos fraudulentos. Una simple búsqueda de “Slip and Falls Scams” (“Estafas por resbalones y caídas”) en YouTube3, da como resultado cientos de videos de personas fingiendo las caídas.
Debido a la gran cantidad de fraudes de seguros, las empresas aseguradoras desconfían mucho de los reclamos por resbalones y caídas. Existen grupos como el National Insurance Crime Bureau (Oficina Nacional de Delitos de Seguros – NICB por sus siglas en inglés) que se especializan en investigar reclamos por fraude para empresas que sospechan que existe un delito. Sus investigaciones pueden llevar a cargos criminales. Esta perspectiva histórica es una de las razones por las que los resbalones y caídas son difíciles de abordar. Si desea obtener una compensación por sus lesiones, es más probable que deba presentar una demanda en un caso de estos que en un caso de accidente automovilístico. Esta es también una de las razones por las que estos casos no suelen tener éxito. A continuación, se explica otra razón, quizás la más importante.
Un ejercicio simple
Esta es una foto de los restos de una escena de un resbalón y una caída.
Observe la fotografía y hágase la simple pregunta, “¿Qué veo?”
Si su respuesta fue, “un simple riesgo” o “evidencia de negligencia”, entonces está pensando como una víctima de una caída. Cualquiera que vea esa foto verá “agua en el piso”. Y por lo general, cualquier abogado defensor y la mayoría de los miembros del jurado agregan: “¿cómo no lo vio?” o “es muy obvio.” Peor aún después de ver esta foto, muchos miembros del jurado dirán: “Yo lo habría visto, no me habría caído”.
El abogado de la aseguradora haría la fotografía bien grande para que el pequeño charco parezca un lago. Argumentarían que, aunque el dueño de la propiedad podría haber sido negligente, usted, como una persona razonable, debió haber prestado atención y evitado ese peligro potencial. Dicho argumento podría sonar exagerado o irracional, pero desde nuestra experiencia, casi que podríamos garantizarle que la compañía de seguros tomará esa posición.
Francamente no es un argumento irrazonable. Es verdad que debe prestar suficiente atención al entorno. Es verdad que debe actuar como una persona razonable, a quienes usualmente se les enseña a una edad temprana a “mirar antes de dar un paso”. Sin embargo, eso no exime al propietario de su responsabilidad.
Es importante hacer notar que cualquier señal de advertencia puede estar presente. Por lo general se usan señales de piso mojado, cinta amarilla, o pintura anaranjada para resaltar condiciones de riesgo potencial. Estas advertencias son tomadas en cuenta para que la empresa aseguradora argumente que su cliente tomó las medidas apropiadas para mitigar los peligros. Si usted ve cualquiera de estas señales, es mejor evitar el área del todo. Si continúa y sufre una caída, se presume que usted asumió el riesgo asociado a dicho peligro. A su vez, esto le ayuda a la defensa a decir que el dueño de la propiedad no es responsable. Aunque esto por sí solo no es suficiente para desestimar un reclamo, no querrá darle ventajas a la contraparte para que se traiga abajo su caso. No querrá alimentar el miedo al fraude de seguros.
Las personas con mayor riesgo de caídas
Las personas mayores de 65 años son las más propensas a sufrir una caída. Un estudio realizado entre el 2007 y 2016, mostró un aumento del 30% en las fatalidades por resbalones y caídas.4 En el 2007, hubo un promedio de 47 muertes por cada 100,000 caídas en los Estados Unidos. Este número aumentó a 61 muertes por cada 100,000 en el 2016. Dos años después, en el 2018, Arizona tuvo 84 muertes por cada 100,000.
Es importante recordar que, aunque las personas mayores son las más propensas a sufrir caídas, como abogados especializados hemos representado a niños y muchas personas de mediana edad que también han tenido este tipo de accidentes.
Podría decirse que el 100% de las caídas accidentales son evitables. Según nuestra experiencia, alguien en algún lugar no tomó las medidas apropiadas para evitar que ocurriera una lesión. A pesar de que la situación conducente a una caída podría no estar bajo su control, hay muchas cosas que puede hacer para minimizar el riesgo.5
Lo principal que puede hacer es estar consciente de su entorno. Esto se conoce normalmente como “conciencia situacional”. Solemos subestimarla cuando nos encontramos en entornos familiares. Por ejemplo, ¿alguna vez ha dominado la acción de desplazarse alrededor de los muebles en una habitación, incluso en la oscuridad, y un día se golpea en una esquina de una mesa o una silla? Tal vez alguien limpió la habitación y los muebles se movieron ligeramente. Aunque era básicamente el mismo entorno, esos cambios menores no percatados se convirtieron en un peligro potencial. Lo mismo puede pasar cuando va a lugares familiares. Instintivamente, usted entra y camina como siempre lo ha hecho sin darse cuenta de los pequeños cambios que podrían haber ocurrido desde su última visita. Podría haber un tapete enrollado o líquido en el piso. En otras palabras, el entorno con el que estaba familiarizado no es más el mismo.
Adicionalmente, hay una cantidad desmesurada de cosas que están buscando su atención. Una simple distracción podría hacer que no vea peligros mayores, particularmente cuando entra a un lugar que le es familiar. En estos entornos solemos relajarnos y bajamos la guardia, permitiéndonos enfocar nuestra atención en cuestiones no relacionadas con la seguridad.
Cuando está en un entorno no familiar, podría estar preocupado por encontrar el baño o a algún empleado. Se suele tener un propósito específico en mente. Esto ocupa la mayor parte de su atención, lo que podría llevar a una visión de túnel tanto visual como cognitiva. En dicho estado existe un riesgo significativo de lesión. Un gran ejemplo de esto es el experimento del “Gorila invisible”:6
Este experimentó reveló que cuando estamos activamente enfocados en una tarea, nos perdemos mucho de lo que está pasando alrededor.
Las empresas de seguros tienen abogados que se dedican a desacreditar reclamos. Utilizan herramientas como la NICB y el miedo de fraude para aprovecharse de las víctimas de lesiones. Por lo tanto, es esencial que involucre a abogados experimentados lo antes posible. Gage Mathers tiene décadas de experiencia en reclamos de responsabilidad de locales. Tener al equipo correcto de su lado le ayudará a prevenir que las empresas de seguros se aprovechen de usted, y así maximizar sus posibilidades de recibir la compensación que merece.
- Top 10 Preventable Injuries. Deaths by Demographics. Injury Facts.
- Lorenzo, George. What a Spoliation Letter Can Do to Preserve Your Claim. Enjuris.
- Slip and Fall Scams. YouTube.
- Important Facts about Falls. CDC.
- Preventing Falls: A Guide to Implementing Effective Community-Based Fall Prevention Programs. CDC.
- The Invisible Gorilla. YouTube. 14 de Febrero 2011.